Recuerda que tener un hijo es
el mejor Regalo del Cielo,
sobre todas las cosas.
¿Has pensado la magnitud de ese regalo?
En lo grande y maravillo que es?
Entonces; Fuera, muy lejos esa depresión!!
¿Cuántos hombres quisieran estar en tu lugar?
Lo has pensado?...
Ante la llegada de un bebé las cosas definitivamente se orientan hacia el gran
esfuerzo que tienen que hacer los padres para que todo funcione bien, el bebé
esté bien atendido, la mamá se recupere pronto y el papá no se sienta ignorado.
La depresión posparto es en algunos casos también para los hombres. Aunque al
hombre no le sucede por causas hormonales, el gran cambio de vida y las nuevas
responsabilidades que acaba de adquirir, aunado a mucho trabajo en la casa y
falta de sueño son suficientes para deprimir a cualquiera.
Es común que al nacer un bebé el padre sienta que lo hacen a un lado, pero en
gran medida, este sentimiento depende de la actitud que tenga y de la
personalidad del individuo.
El conflicto de emociones caracteriza la paternidad de los primeros meses.
Por una parte se siente poderoso y orgulloso por haber sido parte de la creación
de una nueva vida, pero por otra se siente impotente al no poder satisfacer las
necesidades de su bebé, que muchas veces no sabe cuáles son. Este tipo de
sentimientos es completamente normal.
Tal vez se preocupe de no poder ser el papá perfecto, quizá dude si es capaz de
mantener a su nueva familia, o si podrá protegerla de los males del mundo.
Estos miedos son parte de la transición de ser hombre y esposo a ser padre, y no
deben preocuparle demasiado.
Antes de que fueran padres, la pareja pasaba mucho tiempo juntos, y
fortaleciendo su relación. Ahora no tienen casi tiempo para ellos. Lo poco que
les deja el bebé lo querrán utilizar para descansar, y si todavía les sobra un
poquito y pueden conversar, seguramente el tema será el bebé.
Si estás en esta situación:
En la medida de lo posible trata de pasar aunque sea unos minutos solos con tu
esposa. Trata de hablar de otros temas que no tengan nada que ver con el bebé, y
sobre todo, trata de hacer sentir a tu pareja como una persona y no como una
máquina de cambiar pañales y dar de comer, aunque sea por unos momentos.
Recuerda que tu pareja te necesita más que nunca, por fácil que haya sido el
parto requerirá de algunos días para recuperarse por completo.
Apóyala en las tareas de la casa. Involúcrate en el cuidado del bebé. Si tú
estás dispuesto a cambiar pañales, bañar al bebé, ayudar a la hora de la comida,
etc., te involucrarás mucho más con él.
Ayúdala a su recuperación. Es muy importante que le des a tu pareja todo el
apoyo necesario para que guarde, dentro de lo posible, la cuarentena.
Infórmate sobre los cambios emocionales que sufre la mujer después del parto, ya
que tu pareja requerirá de mucho apoyo y comprensión, en especial si padece
depresión, la cual es muy común y en la mayoría de los casos pasajera.
Aligérale la carga. Aunque muchos factores contribuyen a la depresión, el
cansancio es uno de los que más cuenta. La falta de sueño antes y después del
parto, el esfuerzo que representa cuidar a un recién nacido y atender la casa
pueden producirle un verdadero agotamiento.
Hazla sentir importante. Es común que las madres pasen de ser el centro de
atención cuando estaban embarazadas y todo el mundo les preguntaba cómo estaban.
También es común que las madres primerizas se sientan inútiles ante todo lo que
representa cuidar a un bebé y encima de todo, los kilos que esperaban perder
mágicamente después del embarazo aún siguen ahí y se sienten más feas que nunca.
Hazle comentarios que la hagan sentir bien y apoyada, detalles como comprar su
cena favorita o un ramo de flores pueden ser de mucha ayuda.
Mantengan siempre un canal de comunicación abierto, expresen sus sentimientos
para evitar malos entendidos o disgustos innecesarios.
Procura pasar mucho tiempo con ella y aprovechen los momentos en que el bebé
está dormido o alguien más pueda cuidar de él para pasar tiempo juntos, platicar
(de cosas que no sean la casa y el bebé) y alimentar su relación.
Y entonces, en menos de dos días verás cómo tu depresión desaparece de inmediato
al dedicarte a tu esposa, y tu hijo, dejando de pensar en ti solo.
VERÁS QUE CON TU AMOR MANIFESTADO
TODO SE RESUELVE PRONTO
